Y no fue ayer mi vida, un durazno sin flor
que nos dejaron cantando en lo desnudo
no fue acaso ayer el llanto
el cielo bajo amparando
detrás y después de ti
sólo la muerte
un viento fuerte
hace cuarenta años
me dicen
pero los gritos retumban desde ayer
mis lágrimas no se han secado
nuestras llagas no se cierran
y queda un abandono
el terror inmenso
y al final del túnel no hay promesa
de una luz.
Fue sólo ayer
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