DESTRABALENGUAS

El seso es un socio sucio que no se sacia


El alma es un arma blanca que no se calma

Pero la frase… es una fresa

TESOROS

Hoy soy rica


tengo ciento y un sueños

mi hogar a cuestas

ninguna deuda

la magia de un camino que se abre

gota a gota

la maravilla del amor

el milagro de la amistad

un corazón

Tengo la fuerza

RELOJERO

Tú mueves en mi pecho pequeños mecanismos


como de relojería.

Tú, lluvia matapajaritos en el desierto

que ya es desierto florido.


Así lluvia, relojero, me has cambiado el paisaje

el tiempo.

Por eso paga tu culpa, forastero

científico irrespetuoso de mi ecología:

te condeno a quedarte para siempre

que ya no soy la misma

que ya no puedo vivir

sin tu agua

sin tu ritmo.

INSOMNIO

La noche se vuelve pasadizo de topos


vastedad de signos y pañuelos



Precisas trajinar rincones

encender la luz



Entre los extremos de un tictac remoto

roer páginas y mendrugos



Mañana será la huelga de huesos

el insufrible dolor de pies



Un rostro persiste, un toque, un aroma;

pero eso fue ayer



Vamos por ahora a continuar impunes,

la noche es eterna para los insomnes

FECHORÍAS

No acababas de decir


cuando ya terminaba de imaginarte

cuando la fechoría no paraba ahí

sino latiendo en mi pecho



Ay dime con qué derecho

irrumpes ahora en mi sueño



Yo me pregunto en silencio

si arriscas la nariz

de la forma que sospecho

si te ríes fuerte

si nadie te soporta el genio

si te gustan las guitarras

los cariños en el cuello

si vas a mostrarme el rostro

si voy a poder leerlo

CONFESIÓN DE SIESTA

Aboliendo el lejos, así te quiero:


cerca y dejando que todo ocurra en silencio,

con los ojos bien abiertos



(Juguemos a que tenemos

unos postigos verdes, un imperio enano,

una muralla que es una cebra al sol?)



Espero tus manos, grafías de luz,

haciendo acopio de costillas huérfanas

y caderas furibundas



Espero tus manos tanto como tu alma

o un rumor de espuma traspasada

HUECO

Llevarás por tu vida en el pecho


ese espacio

que sólo mi mano ha podido colmar.

Y volarán mis manos

como palomas sin destino

extraviadas de su hogar.

Hueco se te volverá el anhelo

imposible de llenar

porque esa hendidura en tu pecho

sólo conoce mis dedos

RESABIOS DE UN FRACASO

Cómo, cuándo, dónde y por qué


Se hizo lo que se hizo

Se pensó, se besó, se rió

Y se entregó al sacrificio

Ese cielo incendiado de antaño

Que presagiaba amaneceres pletóricos y

Que se volvió un solo nubarrón.

Quisiera comprender cuál es el sino de este error

Si la humillación de estas llagas

Tiene sentido alguno

Si fue destino posible

En función de una lección

Si fue de alguna manera

En algún momento

En algún lugar

O por alguna razón

Más que la añoranza

De ese viento anterior

Más que el sólo resabio

De un fracaso

ESTRELLA

Libérame


con tu espera sombría

con tu dulce incomprensión

Remédiame

como a un mal inevitable

Acaríciame

como al mejor de tus deseos

Déjame ser

tu niñez rezagada

un lluvioso recuerdo

Presiénteme

que soy tu buena estrella

Que no hay mal

que por bien no venga

SÓLO DIOS

No cuentes con que en verano me vista más de azul;


el cristal de las nevadas acaparó mi color

y en las verdes madrugadas ya no me arropa el amor.

Qué dirías si te digo que sólo me importa Dios

que sólo bajo su abrigo me puedo sentir mejor

que no calzo pies de aire, que apenas si puedo andar

si la brisa por la tarde ya no me habla del mar

si digo Dios y digo Ángel, si no reparo en rezar;

dirías que he enloquecido en arrebato del mal

que mi alma se ha torcido; que mi mente igual.

Pero yo no te merezco en este amargo sermón

no soy canuta ni loca, ni he perdido mi pudor

no abandono la cultura ni el humanismo del sol

pero recojo a la luna en las noches de calor

y bailo pagana y muda esperando la ovación

con que me reciba el cielo

cuando cante mi canción

cuando cuente que fui tuya

cuando exilie mi rencor

y pueda aseverar sin duda

que sólo me importa Dios.

NOCHES RENDIDAS

Nuestras noches juntos estarán espiando

el día en que, separados, lleguemos a las puertas del cielo

y serán ellas las que nos pedirán cuentas, no San Pedro.

Y qué cuentas rendiremos, amor a nuestras noches juntos

qué les diremos cuando pregunten por qué las abandonamos

cuando reclamen haberse deshecho en lo oscuro

de una vida entera

cuando proclamen que nunca logramos engañarlas, amor

qué les diremos

qué les diremos amor a nuestras noches juntos

si no hay cielo

ni rendición de cuentas

qué les dirás, amor?

qué le dirás al río

porque sé que él te pregunta en la soledad

a los amigos

qué le dirás a lo trivial

al viejo mendigo

a la bruja

al musgo

a los perros

y a las papas con arroz

cuando te pregunten

por qué no he venido más?

RECORDARTE

Cómo no va a ser lindo recordarte


si cuando te recuerdo

es como tenerte para siempre

si me perteneces

como le perteneces a la tierra

a los árboles de la avenida

a los caminos que todavía has de andar

lejos de mí

pero me perteneces

cada vez

que vuelvo a visitarte

en este lugar en que aún me habitas

y me habitarás

desdoblado

a través de las distancias

y del tiempo.



Cómo no va a ser lindo recordarte

conservar tu imagen

y más que eso

esa noche en la llovizna

poder tocarte

sentir tu olor

repasar cien veces tus facciones

bajo la luz del neón

besarte

no ya en el antiguo beso

sino besarte nuevo

renacido cada vez

ebrio de realidad

devuelto a esta tierra

de nadie

a la que perteneces.



Cómo no va a ser lindo recordarte

si es como si los mil caminos

inventados a partir de tu recuerdo

las mil posibilidades silenciadas

desde tu ausencia fundamental

batieran en retirada

inermes y destrozados

por nuestra tierra de nadie

por la noche

la llovizna

por el beso.

ALCANZANDO EL CIELO Para Cristián

Me dicen que hace  años que te has muerto

y yo apenas me lo creo.



Será que vives en el cielo,

porque a él vuela la mirada que te busca,



encontrando, en cambio, el amparo

de una nube ocasional,

de un aguacero.


Acaso me consuelas con un soplo

del paisaje diverso que ahora habitas;


aquel donde por fin nos comprendemos.


Atravieso distancias y te toco

en un gesto repetido

hasta el agobio:


Si estás ahí, cómo saberlo?



Saber de qué manera participas

del trabajo del sol y de las hojas,

de este desorden de pájaros,

del ciclo renovado de las cosas;



si contiene un alma inmortal

tu voz y tus deseos

tus pequeñas orejas

tus manos pecosas

tu inmensidad de ojos

tu recuerdo de mí



Inspirar profundo es trocar la infinitud

en tu imagen:

invierno en la montaña

su viento irrepetible

su pregunta imposible.